“Las empresas industriales están cada vez más concientizadas, el problema es que muchas veces no saben por dónde empezar porque cualquier cambio en la maquinaria y los procesos es complejo, además de costoso económicamente”, reconoce Myriam García-Berro, directora de Tecnología y Transferencia del Centro Tecnológico de Catalunya Eurecat, en España.
Sin embargo, integrar la sostenibilidad en la estrategia empresarial de las fábricas no es una opción, sino más bien una obligación: “La industria será sostenible o no será, es una tendencia imparable”, asegura García-Berro. En este sentido, el director general y operativo de Eurecat, Xavier López, afirma que “la sostenibilidad es hoy en día uno de los dos mayores retos de la industria, junto a la transformación digital”.
¿Qué implica integrar la sostenibilidad en las fábricas? Ser sostenible significa ser capaz de satisfacer las necesidades actuales sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer las suyas.
Traducido a la industria supone apostar por la eficiencia energética, las renovables, el reciclaje, la optimización de recursos, el ecodiseño, la producción local, la reducción de emisiones o el tratamiento del agua, entre otras cuestiones. Y todo ello, sin comprometer la rentabilidad industrial. “Rentabilidad y sostenibilidad deben ir de la mano. Si la industria no es rentable desde el punto económico, la sostenibilidad no será una realidad”, advierte Pere Homs, director del Col·legi d’Enginyers Industrials de Catalunya.
Los expertos consultados advierten que no hay soluciones únicas. “Cada sector debe hacer frente a sus problemáticas específicas”, señala López. En muchos casos, la tecnología es una de las mejores aliadas de las fábricas en su cruzada a favor de la sostenibilidad, especialmente la que se conoce como industria 4.0, que está íntimamente ligada a la inteligencia artificial.
Homs explica el caso de Gestamp, uno de los mayores proveedores mundiales de estructuras y componentes metálicos para automoción. Una plataforma de gestión de energía eficiente basada en la nube y que utiliza el big data para optimizar el consumo ha permitido a Gestamp reducir hasta un 15% el consumo de energía en 14 de sus plantas.
La innovación es otra gran vía para avanzar hacia la sostenibilidad. El proyecto europeo Bioboard, con 14 participantes entre los cuales figura Llet Nostra, ha desarrollado un recubrimiento biodegradable a partir de proteínas de leche y residuos de patata que puede sustituir el plástico que recubre los envases alimentarios y facilita su reciclaje.
En algunas ocasiones la sostenibilidad implica un replanteamiento de la actividad. En lugar de simplemente vender sus motores de aviones, Rolls Royce ofrece un contrato a largo plazo, basado en el pago por horas de vuelo. Rolls Royce monitoriza constantemente los motores para prevenir reparaciones y acciones de mantenimiento no programadas. Una propuesta más eficiente que la venta de turbinas y el posterior servicio de revisión y reparación.
25-03-2019 / GS1 Perú